En el mundo actual, los días están llenos de velocidad y presión por cumplir con todas las obligaciones, por lo que cuidar la mente se ha convertido en una prioridad y en este artículo exploraremos las claves científicas para mantener el bienestar mental.
En este sentido, tener una mente saludable no debería ser un lujo ni, mucho menos, un asunto superficial. Al contrario, se trata de una necesidad básica para vivir con equilibrio y propósito.
Así pues, es fundamental comprender cómo mantener la calma en medio del ajetreado ritmo de vida, así como también reconectar consigo mismo y cultivar relaciones saludables. Todos estos factores ayudarán a tener una vida más plena.
¿Cuáles son las claves para mantener el bienestar mental?
Cada vez más personas le están dando mayor importancia al cuidado de la mente, debido a que mantener el equilibrio es crucial para tener salud, y por ende, ser más productivos en el día a día.
Paradójicamente, la hiperconectividad, las exigencias laborales y la incertidumbre global son factores que están afectando la salud emocional. La buena noticia es que al aprender a gestionar las emociones y los retos diarios, se puede lograr el tan ansiado equilibrio.
Al respecto, no se trata solo de reducir el estrés o practicar la meditación, sino que para tener bienestar mental se deben adoptar hábitos de autocuidado cada día. Estas pueden ser pequeñas acciones desde el descanso consciente hasta tomar el tiempo para comer.
Cuando las personas están saturadas o tienen poca energía, una simple y pequeña molestia puede provocar una respuesta exagerada o explosiva. Según los expertos, esto puede ocurrir por falta de autocontrol o por un déficit de energía.
Estudios científicos recientes han demostrado que el estado de ánimo y emocionalidad están muy ligados a cómo el cerebro gestiona y distribuye la energía interna. Por eso, los especialistas de INECO (Instituto de Neurología Cognitiva) desarrollaron cuatro pasos para tener estabilidad mental.
El primero es observar cómo está el cuerpo antes de reaccionar. De acuerdo con la neurociencia esto se llama interocepción, que es la capacidad de detectar las señales que provienen del cuerpo: ritmo cardíaco, respiración, tensión muscular, hambre o fatiga.
De modo que tomarse unos segundos para reconocer estas sensaciones permite anticipar necesidades antes de que el cuerpo entre en “modo alarma”. Si el cansancio o la irritabilidad aparecen, tal vez sea señal de que las reservas energéticas están bajas.
Otras estrategias para cuidar la mente
La segunda clave es comer y dormir de forma adecuada para regularse emocionalmente. En este sentido, estas dos actividades ayudan a reponer energía, estabilizar el ánimo y evitar respuestas emocionales desmedidas.
En tercer lugar se encuentra hacer microactividades que otorguen energía. Entre estas destaca caminar unos minutos, hablar con un amigo, hacer estiramientos o jugar con una mascota.
Al respecto, la investigadora Camilla Nord, de la Universidad de Cambridge, explicó que el cerebro se recalibra por medio de pequeñas pausas que reducen el estrés y favorecen la homeostasis.
Finalmente, otras de las claves para mantener el bienestar mental es ajustar las exigencias en momentos de cambio. En etapas de transición (mudanzas, exámenes, pérdidas o sobrecarga laboral), es conveniente ajustar las tareas diarias como una forma de gestionar la energía.
Información de Gizmodo en español / redacción Neuroweb
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